Memento mori

Memento mori es una frase en latín que significa “recuerda que eres mortal”. En tiempos del Imperio Romano, cuando un general victorioso desfilaba por las calles de Roma, un siervo le acompañaba susurrándole esta frase. Una sencilla advertencia para que el clamor de la muchedumbre no le hiciese perder el norte. Un aviso de que los triunfos de hoy pueden no significar nada mañana.

En la actualidad, la bolsa americana es el ejemplo claro de un gran general victorioso. En cinco años, la rentabilidad acumulada es superior al 120%. Con la inestimable ayuda de su gran aliado, Ben Bernanke, los índices bursátiles al otro lado del Atlántico han superado innumerables batallas. En estas páginas se ha escrito de los problemas del sistema financiero de EE.UU., de la rebaja de la calificación crediticia del país, del temido precipicio fiscal o, más recientemente, de la quiebra de Detroit. Todos estos enfrentamientos han sido superados por la bolsa americana sin grandes bajas, en una campaña que puede considerase épica, mientras que el resto de grandes bolsas mundiales se quedaban muy atrás.

Sin embargo, el Presidente de la FED lanzó un susurro a finales de mayo advirtiendo que, tal vez, ha llegado el momento de reducir las inyecciones de liquidez, el arma secreta del general invicto. Unas medidas que inicialmente eran consideradas extraordinarias, pero que ya llevan 5 años en marcha. Este primer aviso supuso un pequeño traspié durante el mes de junio, pero en las últimas semanas nuestro general ha logrado recuperar su ritmo triunfante.

Con un agosto que se intuye tranquilo, septiembre parece ser el mes clave. Será entonces cuando Ben Bernanke decida si hacer efectiva su advertencia. Creemos que la pérdida de su gran aliado va a ser una prueba clave para la fortaleza del general imparable. Asi pues, ¡Memento mori, bolsa americana!

David Blasco Palau (dblascop@ibercaja.es). Ibercaja. Heraldo de Aragón, 4 de agosto de 2013