Servicio de estudios: Colaboraciones
21-12-2014

Época de Excesos

Ya llegan las Navidades, época donde todos cometemos más de un exceso. Pero hoy vamos a dejar de lado las cenas de empresa, reuniones con amigos, familiares...etc. para reflexionar sobre los excesos que están presentes en el entorno macroeconómico a día de hoy. Si bien es cierto que a más de uno de ustedes se le ocurrirán más, yo voy a destacar tres. El exceso de ahorro, el exceso de oferta de petróleo y el exceso de liquidez. El exceso de ahorro explicaría este mundo de bajo crecimiento, baja inflación y bajos tipos de interés. Por varias razones el ahorro está excediendo a la inversión mundial. Para que nos entendamos, la economía global sufre de una deficiente demanda, tanto por el lado del consumo como por el lado de la inversión. Será necesario articular los mecanismos adecuados para estimular una demanda solvente y, de este modo, enfrentar los miedos deflacionistas. Continuando, nos encontramos con el exceso en la oferta de petróleo, tras la oposición de Arabia Saudí a que la OPEP recortase la producción de crudo. Esto debería ser una buena noticia, ya que se transfiere riqueza desde los productores de crudo hacia los consumidores, que generalmente gastan un mayor porcentaje de sus ingresos. Ello conducirá a un mayor gasto en consumo, si bien compensado por la menor inversión en el sector de energía. Sin embargo también podemos derivar otro efecto de la bajada en precios del petróleo, el impacto negativo en las expectativas de inflación por el menor coste de la energía. Tras la lectura de estas líneas ya habrán podido deducir que ante el exceso de ahorro, los precios de la energía a la baja y con caídas en las expectativas de inflación los bancos centrales van a mantener su política acomodaticia por mas tiempo. ¿El resultado? Otro exceso, el exceso de liquidez que debería sostener los precios de los activos financieros el próximo año. Les deseo que tengan una Feliz Navidad.

Pedro Lacambra Prieto (placambra@ibercaja.es). Ibercaja Gestión. Heraldo de Aragón, 21 de diciembre de 2014


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